sábado

Estadía nocturna



La luz de tu mirada esquiva, ilumina mi corazón.

La energía de tus movimientos, me dice que estas viva.

Los dedos de tus manos, tienen preguntas para mi.

Mis ganas de cuidado, las guardo para estar contigo.

El color violeta de tu nombre, comienza alegrar nuestra noche.

Sonido mudo


Y tu voz callada gritándoles lo que yo ya sé, dónde está?

Se agotó, como cansada están mis ganas de pelear.

Al final, los caminos te muestran como conquistar aquellas tierras.

Sólo ten paciencia, y recuerda siempre quién eres, quiénes somos.

No la que proclama una noticia histórica que ya miramos, si no la que instala nuevas canciones por donde vaya.

Tomando y multiplicando fuerzas junto a la Pachamama.


El valor de la existencia o cuántas veces he contado hasta 10


Porque tu no vienes para acá solo a saludarme.
Porque no llegas de improviso y te presentas.
Porque avisas y mandas un mensaje, escriturado o literal, pero al fin se entiende. 

Te presentas, dices tu nombre y el detalle de tu familia.
Si lo tienes, tu formación educativa; y si lo pidiesen, tus experiencia laboral. 
Y si les intrigas, tu planificación para unos cuantos años más. 

Y ahí acaba.

Y tú, te reservas de un cuanto hay. 



Redactar


Transcribir, redactar y entonar unos versos para ti es lo que intento. 

Mientras tanto me distraigo en leer las malas noticias, que me abruman minuto a minuto. 

Y yo evadiendo sonreír, buscar y tropezar con el tono adecuado, con el ritmo en acuerdo a lo que quiero contar. 

¿Por qué me alejo de aquello que soy?, es lo que me pregunto en cuanto quedo en silencio, sin escuchar respuesta. 

Esta bien, si no es tanto lo que esta vida se esta perdiendo. 
Sólo unas cuantas líneas de sin sentidos dirigidos a sabes tú quién. 

jueves

Una explicación



Como aquel que sale del clóset a exponer su sexualidad, nuestra realidad se devela ante todos y se muestra en toda su crudeza y desenfado, provocando incredulidad y asombro. 

Se entiende que se hace necesario, como tantas otras veces, un tiempo de acomodo y adaptación. Pero también se sabe que se requiere usar el dramatismo y sentido de urgencia que todo cambio pide y exige. 

miércoles

Una mirada fractal

Como un espejo, utilízame como un reflejo. 
Trátame como te tratarías, con la rudeza o suavidad que te acomode. Dejando de lado los resabios de animal dominante. 
Mírame a los ojos, respira y háblame. Dime una frase simple, pídeme abrir la puerta. Se directo, sin palabras que lo adorne, y que sobren.
Deja salir la verdad, tus deseos más íntimos, trata de confiar en mi. 
Cuéntame si te resulta, si te sientes un igual. 
Luego sal a caminar por la calle y evita las miradas de los que son como yo. 
Baja la vista, cierra tus oídos a esos susurros extraños que hablan de tu cuerpo. 
Controla tus emociones, no sientas rabia ni menos pena. Incluso, acostúmbrate, imagina que es lluvia correr. 
Luego busca trabajo y evita ser servicial, o no te verán. 
Intenta proponer una idea revolucionaria y luego ve a tu casa a regar las plantas, eso lo haces fenomenal. 
Al final del día ponte bonita para mí, sonríe con victoria, y luego recuéstate a mi lado. 
Sueña con tus nuevos logros a alcanzar, mientras velas mi dormir.

Caricias


El amor que lo cubre todo, 

que proteja la rabia que trae el golpe de tu mano, y a mi piel, que se sonroja y brota llagas. 

que contenga mis lagrimas de sangre de los surcos de mi boca, que se abren en el encuentro con el suelo. 

Y luego al final, me abrazas con la mirada, exigiendo y reclamando obediencia.

Mirada de color


El arcoiris de mi ventana me invita a salir. 
Con mis ojitos verde violetas que parpadean para ir. 
A compartir con sus colores que me hacen sonreír. 
En tu arrullo cariñoso de una tarde de abril. 


Un desconocido más


El creyó que era un cumplido, cuando acerco su cabeza a mi oído y susurro palabras de alago de mi cuerpo en desarrollo. Mientras en un hábil movimiento, levantaba mi uniforme escolar y violentaba mi inocencia introduciendo sus dedos en mi intimidad.

Solo eso le bastó para ganar el aprecio de sus amigos, que celebraban su hazaña y mi compañera de camino se enterara que algo sucedía. 

Pero no fui capaz de hablar, no tuve a mi alcance las palabras que hoy encuentro para narrar aquel instante que comencé a comprender lo que era ser mujer, en mi mundo extraño. 


Grito de guerra


Me sorprende que te sorprenda mi realidad.
Me molesta que ahora te moleste mi condición.
Me incomoda que te incomode el lenguaje soez.

No me creo que tú te creas que mis batallas sean las tuyas.  
No me convences que te convenzas que quieras perder.
No me sirve que te sirvas de mis palabras.

No lograrás que logremos dejarlos en paz. Esta vez no. 


jueves

Ropas


Rásgalo y ve que hay abajo.

Sólo encontraras carne y curvas.

Transpiración y sudor de trabajo arduo, de esfuerzo mal recomenzado.

¿Por qué buscas en mí?


Diagnóstico


Es necesario decirlo? Acaso lo disfrutas al gritarle al mundo?

Finalmente tenemos un fin, una fecha de caducidad y la mía parece ya estar rondando en las manos de los que dicen saber. Pero yo no quería conocer?

Nunca me ha gustado que revelen el futuro, siempre lo he querido descubrir yo y sentir que mis desiciones junto con la vida la vamos forjando. Pero vienes tu y le pones una fecha, la sentencias.

No sé si creer. Si poner  ganas a lo que dices. Yo quiero ver lo que viene y comerme el futuro. Yo quiero escribir una y otra vez mi camino, y torcerlo las veces que sea necesario. Y dejar mudo al público, que se queda impávido y estático en sus propias vidas.

No quiero que se me revuelva el intestino y volver a sentir miedo, no quiero olvidar que Dios existe y que de él depende que pasa con mi vida. No quiero comprar tus temores y pagar una vez más por eso. Quiero ser libre y volar por sobre todo esto. Muy lejos de aquí.


Intenciones


Compañero, quiero que cuando me mires veas una persona.

Quiero que ni mi sexo, ni mi género, ni mi frecuencia cardíaca importen más que mis ideas.

No quiero que mis ropas, mis joyas, mi maquillaje o la ausencia de todo eso nublen tu mirada.

No quiero que mis ojos verdes te recuerden un mar de turquesa, ni mis curvas las olas que navegas.

No quiero ser el objeto de tus deseos, ni de tus carencias, ni frustraciones. Ni menos saberlo.

Quiero ser juzgada por mis malas propuestas, mi falta de eficiencia y apuro de devorarme el mundo.

Quiero construir contigo una agradable conversación o compartir un sueño común que ayude a nuestro país.

No quiero ser tu amiga, ni tu amante, ni tu esposa, no soy eso para ti, no te equivoques.




sábado

Pasos nuevos

Dicen que estoy bien, en una noche estrellada, en cambio yo estoy contigo.

Que voy de viaje, de regreso a casa, y sin embargo yo por la calle con paso de prisa por encontrarte.


Dicen que les falle,  que no llegue a la cita. Y yo en cambio sin un recuerdo de aquella vez, pero esperando la nuestra.
(sigue)
 

domingo

El olor a rosas

Se le podrá echar tierra, para con el tiempo convertirse en barro cuando la humedad del roció suave y tibio se mezcle con ella; y el calor del sol ayude a endurecerla.

Pero no te equivoques, no se hará un roca que tapie su salida, en aquel mausoleo. A ratos, vendrán los años seco que quebrajaran su cerradura y permitirá que un breve aroma salga desde dentro. (sigue)